Después de cuidar al Husky,
nos movió el corazón a la Borreguita y a mí, así que decidimos adoptar un
perro, yo me encargué de buscarlos y se los mostraba a ella para decidir. Antes
de mandar nuestra solicitud, le preguntamos a mi roomie si no tenía problemas
pero todo bien. Así que mandamos la solicitud. Bien dicen que tener un perro es
como tener un hijo. Tardaron casi 24 horas en responderme y yo estaba súper
nerviosa, hasta que regresando de la escuela llegó el correo y me dieron los
datos de la persona que tenía la perrita que escogimos. Me valió que fueran las
10 pm y marqué y me contestaron, era una mujer muy amable, platicamos un rato y
quedó de marcarme al día siguiente. No me marcó a la hora que dijo así que le
marqué yo y me pidió que fuera para allá (su casa) a platicar y conocer a la
perrita. Llegué una hora después y rápido las reconocí, caminamos y ya en su
casa platicamos y todo. Me dijo que todo estaba bien y que el fin de semana me
la daba. De eso ya tiene un poco mas de dos semanas.
Le pusimos Naara, es hebreo y significa “niña”. Es
súper chiqueada, no me deja trabajar porque todo el tiempo te pide que la
cargues y la acaricies, ADORA acostarse sobre mis telas y además es súper
celosa, aunque es su otra madre, muere de celos cuando la Borrega está aquí
porque solo me dedico a ella. Pero estamos encantadas ^^ De a pocos vamos
cumpliendo todo lo que queremos. Les dejo unas fotosde Naara <3